Los problemas en la compresión del motor, proceso que se realiza cuando el aire y el combustible se mezclan en los cilindros de un motor, suelen generarse por una perdida de compresión. 

Cuando esto ocurre, el proceso de compresión no se produce correctamente y el motor no alcanza su pleno rendimiento. Repasamos las posibles causas en perdida de compresión del motor y cómo podemos detectar los problemas.  

Causas de la pérdida de compresión del motor

Las causas más comunes que provocan una disminución de la compresión del motor suelen estar relacionadas con averías en otras piezas que guardan relación con su funcionamiento, como las siguientes:

  • Bujía: produce fugas en caso de estar en mala posición o mal estado. 
  • Aceite: si es de mala calidad, la compresión será baja.
  • Culata: si la culata está dañada o mal instalada se producirán fugas y una caída en la compresión. 
  • Segmentos: el problema viene cuando están desgastados, provocando holguras y fugas.
  • Calado distribución: si el calado de distribución no es correcto, las válvulas no ejercen su función correctamente o están dañadas producirán escapes y caída de compresión.
  • Filtro de aceite o catalizador: si los filtros están obstruidos también se producirá una mala compresión.
  • Correa de distribución: desgaste podría hacer que el árbol de levas deje de girar y no se podría abrir de forma correcta la válvula de escape. Esto provocaría la no expulsión de gases.
  • Cilindros: el sobrecalentamiento puede provocar que los segmentos se frenen o dañen, provocando a su vez la imposibilidad de sellado en el cilindro.
  • Junta de culata: si la junta de la culata se daña o rompe generaría un orificio por el que se filtraran los gases. Esto afectaría tanto a la compresión como al rendimiento.
  • Válvulas con fugas: cada cilindro viste en su parte superior una válvula de escape y de admisión. Si este elemento se sobrecalienta, podría generar una pérdida prematura de gas.

Cómo detectar problemas en la compresión del motor

Una pérdida en la compresión suele producir una alta reducción de la presión máxima alcanzada durante la combustión en el motor, por lo que tienes que estar pendiente de los siguientes puntos:

  • ¿Percibes problemas en el arranque o apagado del motor? 
  • ¿El motor consume más agua o refrigerante de lo habitual?
  • ¿Sale humo por el tubo de escape? 
  • ¿Notas el ralentí inestable?
  • ¿El motor pierde potencia? 
  • ¿Aumenta el consumo de combustible?
  • ¿Notas que incrementa el consumo de emisiones contaminantes?

¡Ya sabes cómo detectar posibles problemas en la compresión de tu motor! Si no te fías de tu criterio, acude a un profesional. En Comercial Méndez te podemos aconsejar. Además, somos especialistas en la venta de motores de marcas líderes en el mercado. Contacta con nosotros.